Comparativa: Los 10 mejores monitores de estudio

Los monitores de estudio son un tema muy importante cuando se trata de equipamento de estudio. Incluso diría que los monitores de estudio son el equipo más importante de un estudio de grabación.

Por eso algunos estudios se gastan más de 100.000 euros en monitores. Porque sin un sonido perfecto, equilibrado y limpio, no se pueden tomar decisiones sensatas a la hora de producir/mezclar/masterizar.

Los mejores monitores de estudio permiten escuchar los defectos de la mezcla para manipular los distintos parámetros con mayor eficacia y obtener un mejor resultado que escuchando a través de unos altavoces o auriculares de consumo normales.

Para grabaciones domésticas y estudios caseros, los monitores activos de campo cercano son los mejores monitores de estudio que se pueden comprar. Lo mejor es colocarlos en una mesa, estantería o soporte específico cerca de la mesa de mezclas.

Para los estudios profesionales, a la hora de elegir monitores de estudio hay que tener en cuenta aspectos importantes como el tamaño de la sala, la respuesta en frecuencia de los altavoces, el presupuesto y la fiabilidad a largo plazo.

Los altavoces de gama alta son recomendables para quienes pasan muchas horas en el estudio de grabación, ya que permiten largas sesiones de mezcla sin fatigar los oídos. Ofrecen un sonido transparente en el que puedes confiar y son extremadamente duraderos.

Para un uso esporádico y producciones semiprofesionales o de aficionados, son más adecuados los altavoces de monitorización básicos más baratos. El sonido no es tan transparente como el de modelos más caros, pero una vez que te acostumbras a ellos y los conoces bien, puedes mezclar y masterizar con ellos sin problemas.

A continuación encontrarás nuestra clasificación de los mejores monitores de estudio en todas las categorías de precios, desde los de gama alta hasta los de bajo presupuesto, con descripciones de las características más importantes.

¿Buscas auriculares para tu estudio? Aquí comparo mis 8 favoritos.

Los mejores monitores de estudio

1. Neumann KH120 - Mejores monitores de estudio

La compra de estos monitores de estudio supuso un punto de inflexión en mi carrera como ingeniero de sonido, pues el sonido de estos altavoces es increíble. Cuando los pruebas por primera vez (y si solo has probado modelos más baratos), entiendes por qué el audio de gama alta se llama "high-end": porque oyes las frecuencias agudas con una claridad que nunca habías oído con otros altavoces.

El KH 120 es uno de los monitores con un sonido más honesto en este rango de precios. Con él puedes escuchar cada pequeño detalle, todos los instrumentos tienen su lugar en la mezcla y se pueden distinguir muy bien unos de otros (muy buena profundidad).

Estos monitores de estudio de Neumann constan de un woofer de 5,25" + un tweeter de 1". La curva de frecuencias se rompe en la gama de graves a unos 60 Hz, a unos 52 Hz el nivel debería estar sólo 3 dB por debajo, lo que está bastante bien para unos monitores tan pequeños.

Neumann ha equipado el KH 120 con una "Mathematically Modeled Dispersion™ Waveguide". De este modo, los altavoces proporcionan una distribución del sonido más precisa, tanto en horizontal como en vertical.

El sonido se expande horizontalmente con precisión, por lo que tienes más flexibilidad en la posición de escucha (no tengo que estar exactamente en el centro del triángulo para tener la imagen estéreo perfecta). Verticalmente, sin embargo, la radiación se limita de modo que se reducen las reflexiones en el entorno cercano (mesa, mesa de mezclas, techo). Sencillamente ingenioso.

Estos son mis monitores principales para mezclar y masterizar en este momento. Para ser justos, hay que decir que estos monitores no llegan tan bien a los graves porque solo tienen un woofer de 5,25". Sorprendentemente, los graves siguen siendo muy audibles y las mezclas se transfieren muy bien incluso en sistemas más grandes. Así que puedes confiar plenamente en estos monitores.

Pero también utilizo mis Focal Alpha 65 de vez en cuando, especialmente cuando quiero editar la pista de bajo individualmente o mientras grabo el bajo.

2. Yamaha HS8: Los mejores monitores de estudio para uso semiprofesional

Si buscas unos monitores de grabación compactos para el estudio o el estudio casero que, al igual que los clásicos NS10, te "muestren" todas las irregularidades y detalles al mezclar música, deberías optar por los Yamaha HS8.

Al igual que con los NS10, te encantará -y a veces odiarás- la honestidad de estos altavoces, ¡porque son demasiado honestos! Sobre todo si los comparas con los altavoces KRK, por ejemplo, que tienen los bajos más enfatizados. Pero el resultado sonoro de estos monitores es realmente excepcional, sobre todo teniendo en cuenta lo asequibles que son.

Yo recomendaría estos monitores de estudio a cualquiera que desee mezclar y masterizar, porque sólo con un sonido transparente y prístino se pueden tomar las decisiones correctas a la hora de mezclar y masterizar. Para DJs o productores de EDM, sin embargo, estos monitores podrían no tener suficientes graves, por lo que los KRK Rokit RP8 serían más adecuado.

Cada altavoz biamplificado activo consta de un woofer de 8″, un tweeter de 1″ y un puerto bass reflex en la parte posterior. Estos monitores de estudio no son tan adecuados para salas pequeñas, sino que son mejores en salas con mucho espacio y una acústica óptima, ya que el woofer de 8" puede llegar a ser bastante ruidoso.

Tienen una buena respuesta en frecuencia (38Hz - 30kHz) y están preamplificados para una potencia total de 120 vatios por par.

Si los colocas cerca de una pared, puedes utilizar el selector de la parte posterior para activar la función "Control de sala" y reducir la potencia de las frecuencias bajas. También puedes utilizar la opción de recorte de agudos para aumentar o reducir las frecuencias altas en 2 dB.

Si estos monitores activos de campo cercano son demasiado grandes o demasiado caros, echa un vistazo a sus hermanos pequeños, los Yamaha HS5 (woofer de 5") y los Yamaha HS7 (woofer de 6,5"). También son muy transparentes y suenan muy bien. La diferencia sonora con el HS8 es que los altavoces más pequeños no llegan tan abajo (el HS7 hasta 43 Hz, el HS5 hasta 54 Hz).

3. KRK Rokit RP8 G4 - Mejores monitores de estudio para productores de EDM/Trap

Los KRK Rokit GP8 son más bien lo contrario de los monitores Yamaha: los altavoces Yamaha son muy neutros, naturales y sin adulterar; los Rokit no son neutros y tienen un ligera entonación en el rango de los medios bajos.

Si se comparan los dos altavoces directamente, se puede pensar inicialmente que el KRK suena mejor. Esto se debe a la entonación en la gama media-baja.

Sin embargo, este refuerzo puede hacer que tus mezclas suenen demasiado débiles precisamente en esta área, ya que naturalmente tratas de compensar esto al mezclar. Por lo tanto, mezclar y masterizar con estos altavoces solo es posible si los conoces muy bien y sabes cómo suenan otras canciones mezcladas profesionalmente a través de estos monitores de estudio.

Pero si sólo compones música o eres un DJ y no necesitas masterizar canciones, ¡te recomendaría el KRK Rokit RP8 G4 sin dudarlo! Es muy divertido escuchar música con estos altavoces.

La nueva versión de la serie G4 incluye woofers y tweeters de kevlar, ambos en color amarillo para identificar la marca, y con un puerto bass reflex en la parte frontal, lo que resulta práctico cuando queremos colocar los monitores cerca de la pared.

Ambos altavoces tienen un amplificador interno de clase D y pesan 10,25 kg. Para un mejor agarre al escritorio o a la mesa, la base es de material antideslizante.

Los KRK Rokit GP8 tienen una respuesta en frecuencia de 36Hz - 40KHz, una potencia de salida de 203 vatios y aceptan entradas TRS/XLR balanceadas.

La instalación es la parte más importante de un monitor de estudio. Para conseguir un sonido lo más neutro posible en función de la sala, los Rokit RP8 esconden una pequeña pantalla LCD en la parte trasera que proporciona información útil sobre el control del sonido. Con el botón lateral, puedes seleccionar diferentes combinaciones y ajustar el ecualizador del monitor a la perfección.

4. Genelec 8040: Los mejores monitores de estudio para grandes presupuestos

Genelec es conocida por hacer monitores de estudio de una calidad increíble. Y los Genelec 8040 no son una excepción. Son uno de los mejores altavoces de estudio que he probado que cuestan menos de 1000€.

Estos monitores de estudio tienen unos agudos super claros y precisos (tan buenos como los de Neumann) además de un bajo fuerte y potente que es suficiente para mezclar y masterizar en la mayoría de los géneros. El sonido es muy neutro y equilibrado, y se escuchan todos los detalles con gran precisión.

Estos altavoces tienen un woofer de 6,5" y un tweeter de cúpula metálica de 3/4" con un total de 180W. La calidad de construcción de estos altavoces es excelente y mucho mejor que la mayoría de las otras marcas.

Sin embargo, si trabajas con géneros musicales con mucho bajo (EDM, trap), te vendría bien un subwoofer. Recomiendo encarecidamente el Genelec 7040 - la combinación con los 8040 es una auténtica pasada.

Se incluyen unos prácticos pies de goma -como en todos los monitores Genelec- para el desacoplamiento acústico de la mesa de estudio/soporte.

En general, puedo recomendar estos monitores de estudio a cualquiera que tenga una buena habitación y pueda permitírselos, ¡porque no son baratos!

5. Adam T7V

Si estás buscando un par de monitores de estudio profesionales de alta gama que puedan resistir el paso del tiempo, que tengan una excelente calidad de construcción y que sean excelentes para la grabación en casa y la producción musical de alto nivel, te recomendamos los ADAM T7V.

Estos monitores de estudio activos constan de un woofer de 7″ y un tweeter de cinta U-ART de 1,9″. El woofer, que cubre las frecuencias bajas y medias, funciona por debajo de los 2,5 kHz y es accionado por una bobina de 1,5" y un amplificador PWM de 50W.

Así que cuando nos sentamos frente a estos monitores, se notan hasta los más pequeños cambios en la mezcla. Estos monitores de estudio son muy detallados.

Otra característica (muy) positiva que noté durante las pruebas es que los monitores de estudio ADAM T7V no se fatigan durante el uso intensivo. Esto se debe en parte a que estos altavoces utilizan un tweeter de cinta. Este es un aspecto muy importante para los monitores de estudio, especialmente si tienes largas sesiones de mezcla/masterización en tu estudio.

Incluso a volúmenes muy altos, el T7V mantiene perfectamente la claridad de sonido que esperamos de un par de monitores de gama alta para distinguir adecuadamente los diferentes instrumentos musicales y crear una mezcla equilibrada.

La respuesta en frecuencia de estos monitores es de 39 Hz - 25 kHz. Son recomendables para cualquier tipo de género musical.

6. Neumann KH-150 - la crème de la crème

Estos monitores de estudio salieron al mercado en septiembre de 2022 e inmediatamente causaron sensación. Son los monitores de estudio de 2 vías más grandes de Neumann hasta la fecha e incorporan electrónica controlada por DSP. Esto significa que se pueden utilizar junto con el Neumann MA 1 para adaptar automáticamente el sonido de los monitores a la sala. Y esto funciona de forma excelente, incluso en salas sin tratamiento acústico se pueden hacer buenas mezclas con ellos.

Los Neumann KH-150 tienen un woofer de 6,5″ y el mismo tweeter de 1″ que los KH-120. La potencia total de salida es de 245 W, por lo que pueden llegar a sonar muy fuerte. También tienen mucho headroom, lo que significa que suenan claros y sin distorsiones incluso a volúmenes muy altos.

El sonido de estos monitores es de ensueño: cumplen todo lo que cumplía el KH-120, pero van un poco más abajo en la respuesta de frecuencia y, por tanto, son aún más precisos en la gama de graves. Son extremadamente neutros, los graves tienen mucha garra, pero con precisión, y los agudos son cristalinos. El "procesamiento quirúrgico" del material de audio es posible con estos monitores, incluso los detalles más ocultos se reproducen con gran precisión.

Me gusta especialmente la gama de frecuencias alta de estos altavoces, es increíble lo que se puede oír en las canciones a través de estos altavoces que no se puede oír en absoluto con monitores más baratos - la voz de repente suena mucho más detallada, el hi-hat destaca en la mezcla, la caja de repente puede sonar completamente diferente, y así sucesivamente.

Yo recomendaría a todo el mundo usar estos monitores con el Neumann MA 1 - a menos que estés cien por cien seguro de que tu estudio suena perfecto, entonces no necesitas algo así. Pero incluso en mi estudio, donde he invertido varios miles de euros en acústica, las frecuencias muy bajas no suenan perfectas, y eso se puede solucionar muy fácilmente con la calibración DSP.

Sin embargo, los altavoces no son baratos, cuestan algo menos de 1.500 euros por monitor. Pero sus excelentes prestaciones justifican el precio.

7. Focal Alpha 65 EVO

La nueva serie Evo se distingue claramente de la anterior serie Alpha. Debe su diseño futurista a dos caras de plástico con profundas muescas horizontales diseñadas para reducir la difracción del bafle y conseguir una imagen estéreo más clara y precisa. Los laterales de plástico dan al Alpha 65 Evo un aspecto contemporáneo, mientras que el resto del altavoz está cubierto de vinilo negro.

En el corazón del diseño acústico se encuentra un woofer de 6,5" y un tweeter de cúpula invertida de aluminio de 1". El uso de la cúpula invertida es una característica clásica en la producción de Focal, así como el uso de materiales metálicos en la construcción.

He trabajado con estos monitores de estudio durante mucho tiempo y siempre he estado muy satisfecho. Los graves son agradables, claros y fuertes, y la mezcla está muy equilibrada y se traduce bien en otros sistemas. Lo único que les falta a estos monitores de estudio es un poco más de agudos, porque no se oyen tan bien las frecuencias muy altas como con los monitores Neumann, por ejemplo. Pero la diferencia de precio también es enorme.

Estos monitores activos de estudio pueden llegar a sonar muy fuertes, pero eso es muy agradable con una buena acústica. Así que puedo recomendárselos a todo el mundo. Personalmente, los utilizo junto con mis Neumann KH120, lo que me proporciona un buen equilibrio entre agudos y graves.

8. Genelec 8010: Los mejores monitores de estudio portátiles

Los Genelec 8010 son los mejores monitores de estudio para productores musicales que se desplazan mucho. Estos monitores pueden transportarse cómodamente de un lugar a otro y guardarse en una bolsa pequeña y ligera.

Tenemos un woofer de 3 pulgadas y un tweeter de cúpula metálica de 0,75 pulgadas accionados por dos amplificadores de clase D, cada uno de ellos de 25 W. El crossover está ajustado a 3kHz.

Como en otros altavoces Genelec, encontramos una base que nos permite inclinar los altavoces, mientras que las rejillas protectoras sirven para proteger tanto el woofer como el tweeter de accidentes.

Aunque se trata de altavoces pequeños, encontrarás la calidad Genelec por la que la empresa es famosa, con una excelente calidad de construcción y un sonido muy preciso. Dado que se trata de un modelo pequeño y compacto con un woofer más pequeño que otros monitores de estudio profesionales, tendrás que añadir un subwoofer dedicado para obtener más graves.

En una pequeña habitación de hotel o para viajar, nos siguen pareciendo muy útiles porque podemos mezclar en todas partes de forma profesional.

Por supuesto, el factor de portabilidad y la marca Genelec hacen que haya que pagar un precio más elevado que por un monitor más potente de otra marca, pero para los productores que están en constante movimiento, esta es una de las pocas soluciones disponibles.

9. PreSonus Eris E5: los mejores monitores de estudio para principiantes

Los monitores de estudio PreSonus Eris E5 son una inversión muy pequeña en comparación con los monitores profesionales, pero capaces de reproducir la música con honestidad y precisión. Los recomendamos a quienes no disponen de mucho dinero para montar un pequeño estudio de grabación o para grabar en casa.

Constan de woofers de 5,25 pulgadas y tweeters de cúpula de 1 pulgada, la respuesta en frecuencia es de 53 Hz - 22 kHz y cada altavoz tiene dos amplificadores separados para las frecuencias bajas (45 W) y las altas (35 W).

El puerto de reflejo de bajos en la parte delantera del altavoz aporta claridad y detalle en la presentación de las frecuencias bajas y también significa que pueden colocarse cerca de la pared sin tener muchos reflejos.

La función Acoustic Space de la parte posterior del monitor ayuda a adaptar el sonido a la habitación y atenúa las frecuencias por debajo de 800 Hz. Es útil si lo colocas cerca de una pared, por ejemplo, para evitar la retroalimentación de los graves.

Por otro lado, la función Cut Off corta las frecuencias graves por debajo de los 100 u 80 Hz, lo que se puede utilizar, por ejemplo, si también queremos instalar un subwoofer para estas frecuencias. Los potenciómetros para las frecuencias medias y altas son útiles para ajustar el volumen adecuado alrededor de 1 kHz y por encima de 10 kHz respectivamente.

Por el precio al que se venden, no podemos encontrar una alternativa a estos monitores de estudio. Realmente son el mejor modelo disponible en el rango de precios de menos de 150 euros.

¿Siguen siendo demasiado caros? Entonces echa un vistazo a nuestro test de los Swissonic A204BT, monitores de estudio por 100 €/par.

10. IK Multimedia iLoud Precision MTM

Estos monitores de estudio de IK Multimedia son un poco diferentes porque tienen controladores de medios de 2×5" y tweeters de 1×1,5". Bajan hasta 45 Hz y tienen un sonido muy neutro y detallado en todo el espectro.

Están totalmente controlados por DSP y el ajuste acústico de la sala se realiza automáticamente a través de los micrófonos suministrados. Vienen con X-Monitor, un software para Mac y Windows, para hacerlo desde el ordenador. Funciona muy bien: muestra dónde están los errores en la acústica de la habitación y los corrige automáticamente.

Además, el software puede emular el sonido de más de 20 altavoces conocidos del mercado, una función muy útil para comprobar la transferibilidad de la producción propia a otros sistemas de monitorización.

Los transientes de la música se oyen a la perfección en todo el espectro. Esto es gracias a los transductores de medios perfectamente sintonizados. Con estos altavoces, se hacen audibles detalles que no lo son con otros monitores de estudio, especialmente en la dinámica. Pueden competir fácilmente con altavoces mucho más caros.

Para los productores que trabajan mucho con géneros con muchos graves, puede ser necesario un subwoofer, porque estos monitores de estudio no llegan tan abajo. No obstante, los graves son muy precisos y controlados, y las producciones se trasladan bien a sistemas más grandes.

Preguntas frecuentes

¿Necesito un amplificador para mis monitores de estudio?

Los altavoces pasivos necesitan un amplificador externo, los monitores de estudio activos ya lo tienen integrado, es decir, no necesitan amplificador externo. Todos los monitores de estudio de esta comparativa son activos y, por tanto, pueden conectarse directamente a la interfaz de audio o a la mesa de mezclas.

¿Cuál es la diferencia entre monitor de campo cercano y monitor de campo medio?

Como su nombre indica, los monitores activos de campo cercano se colocan cerca de la posición de escucha, a una distancia de entre 0,5 m y 1,5 m. El punto óptimo de escucha de estos altavoces está muy cerca, no suenan bien a distancia. Sin embargo, son óptimos para estudios pequeños porque suenan muy bien y son relativamente baratos en comparación con los monitores de campo medio.

Los monitores de campo medio están pensados para colocarse a mayor distancia y suelen ser más grandes y caros que los de campo cercano. Tienen una respuesta en frecuencia más amplia y son más ruidosos, pero requieren una habitación más grande. Esto se debe a que el punto de escucha óptimo está lejos, a 2-4 metros de distancia. No son tan direccionales como los monitores de campo cercano, por lo que dispones de un punto de escucha óptimo mucho más amplio en el que moverte.

¿Qué tamaño de membrana me conviene?

La regla es sencilla: cuanto mayor es el diafragma, mejor es la respuesta en frecuencias graves del altavoz. Así que un diafragma grande puede reproducir mejor las frecuencias bajas que uno pequeño, por eso 8″ es el tamaño de woofer más popular en los estudios de grabación.

Para reproducir con precisión las frecuencias muy bajas, siempre se necesita un subwoofer, que puede ser de 8″ a 12″ y llegar hasta los 20 Hz. Algunos monitores de medio campo caros ya incorporan un subwoofer.

Pero no necesita necesariamente un subwoofer o monitores con grandes diafragmas: incluso altavoces más pequeños como el Neumann KH120 ofrecen un sonido óptimo y equilibrado y pueden reproducir las frecuencias bajas con bastante precisión (pero no se "siente" la presión de los graves como con un subwoofer).

¿Dónde deben colocarse los monitores de estudio en la habitación?

Cuanto mayor sea la distancia a la pared, mejor, ya que así se evitan las reflexiones sonoras de la pared trasera. Si no hay más remedio, también puedes colocarlo directamente contra la pared - pero entonces deberías mejorar la acústica de la habitación con medidas de absorción de sonido.

Los monitores de estudio deben formar un triángulo equilátero con la posición de escucha, es decir, la distancia entre los altavoces debe ser igual a la distancia entre la posición de escucha y los altavoces.

¿Cómo conecto mis monitores de estudio a mi interfaz?

Los monitores de estudio se conectan simplemente a la interfaz de audio o a la mesa de mezclas mediante cables jack o XLR. En el caso de los cables jack, siempre deben utilizarse cables balanceados para evitar posibles interferencias en la señal.